Rodeada de campo, y de las llanuras colombianas, ya hace allí La Patasola, aunque en ese entonces era una simple, hermosa y joven mujer de familia, quien atrae la mirada de todos los hombres con su singular belleza. Una bella mujer quien junto a su trabajador esposo se la pasaban vendiendo las cosechas de su patrón y trabajando en la finca de este mismo, llevando así una vida plácida y tranquila alejada del ajetreo de la ciudad, hasta que el momento de la tragedia llegó.
Abandonada allí a su suerte, La Patasola es auxiliada por una campesina, una vecina quien horrorizada había sido espectadora de toda la tragedia y de su desgracia, llama una ambulancia y salva la vida de la mujer, quien se encuentra llenándose de odio y de rencor con su marido por haberle destrozado la vida, arrepentida se convertiría en el terror y la desgracia de todos los hombres infieles, aquellos mal encaminados, juró que sufrirán las consecuencias y lo perderán todo a causa de esta hermosa mujer quien dedicará el resto de su vida a vengarse de los hombres por aquel que hirió su pierna.
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La Patasola es llevada al hospital, pasa allí un buen tiempo para recuperarse, recibiendo también la mala noticia de que no es posible hacer nada por su extremidad, alimentando así su sed de venganza cada vez más.
Afortunadamente, es amparada por la mujer que le salvo la vida en todo su proceso de recuperación, quien como su buena amiga luego de salir del hospital la ayuda y recibe en su casa, pues además de perder su pierna, pierde todo en su vida, haciendo que no tenga ni siquiera un lugar en el cual vivir.
Cuando un día de manera inesperada, su esposo se enteró de su romance con el patrón, se llenó de furia, desvaino su machete y se lanzó contra ellos, cortándole de un solo machetazo la cabeza al patrón, causando horror y sorpresa en los ojos de la bella mujer, quien traumatizada quiso salir huyendo, pero la cual, sin éxito, cayó desangrándose en el pavimento luego de que su esposo le cortara una de sus piernas, luego este la abandonó allí sin piedad para que muriese.
Allí comienza la venganza de La Patasola, saliendo a las calles de la gran ciudad y atrayendo las miradas de todos los hombres quienes indiferentes a su prótesis, caían rendidos a sus pies por su hermoso rostro y su buena figura.
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Su cacería comienza en una despejada noche, ya ella viviendo en la gran ciudad, pero con muy pocos recursos, se encuentra colmada de arrepentimiento al recordar que por su infidelidad, su familia, su trabajó y su tranquila vida como campesina había llegado a su fin, y de la peor manera posible, por lo cual decide conseguir vistosas y llamativas prendas con todos los ahorros que tenía, para dirigirse hacia bares y casinos de alta sociedad en donde más que vengarse, le ensañaría una lección a los hombres infieles con sus esposas, llenos de lujuria y de avaricia.
Su primera víctima fue un acaudalado hombre un poco más mayor que ella, quien al verla entrar por las puertas del casino no dudo ni un instante en quitarle los ojos de encima a su esposa, quien lo acompañaba allí, para mirar e intentar atraer a La Patasola con su fortuna y sus enredadoras palabras, algo que La Patasola aprendería más tarde en esa noche es que esto lo hacía con múltiples mujeres todos los días que visitaba el lugar a espaldas de su mujer.
Transcurrió la noche, la esposa del hombre abandona el lugar pensando que su marido simplemente pasará un buen tiempo apostando con sus amigos, quien en realidad estaba cayendo en los encantos de La Patasola, pues dice él, que sus ojos no habían visto una mujer tan hermosa como ella, ¿quién se imaginaria sus verdaderas intenciones?
El supuesto romance comienza allí, y es constante por algunas semanas mientras la bella mujer recibe agradecidamente dinero y regalos que el hombre le da para enamorarla más, llevándola no solo a su gran hogar a escondidas de su familia, si no también enseñándole sobre su trabajo, negocios y todo lo implicado detrás de un excéntrico y lujoso estilo de vida, probablemente su peor error, porque un día, La Patasola, cansada de fingir su amor por él, lo asesina de una manera limpia y poco sospechosa, tomando también gran cantidad de su dinero, saliendo libre y tranquila del lugar, pues para los ojos de los demás, ella no existía.
Así fue como nació una leyenda para asustar a aquellos hombres desleales y deshonestos
con su familia, tal como,
La Patasola también lo fue con la suya.
Comenzó así una constante cacería de hombres, de los cuales sin excepción se aprovechaba, hasta no solo conseguir la mejor prótesis que podía encontrar para su extremidad faltante, si no también hasta construir una gran fortuna y poner en práctica lo aprendido de la economía de sus víctimas, construyendo una riqueza creada a base de sangre y mentiras pero completamente real para el resto del mundo, consiguiendo un hermoso y amplio lugar a las afueras de la ciudad, una exclusiva, amplia y hermosa casa rodeada de bosque y de animales salvajes, esta sería también el cementerio para aquellos hombres infieles que caen en su trampa.